La muerte de eEspaña: el final de la democracia

Day 3,217, 09:37 Published in Spain Spain by anaximenes

Para muchos eEspaña es una República, para otros una monarquía o un imperio (saludos a Chuchi y a Warm). Sea lo que fuere, a partir de ahora ya no se será lo mismo.

Con la votación que exonera a Leogar de su responsabilidad por haber dado una CS ilegal a un nongrato desde su puesto de Dictador y, por tanto, haber actuado contra este país, sus instituciones y su legislación; se coloca el último clavo de un ataud que ya hace algún tiempo que empezó a fabricarse. Ese sarcófago estaba destinado a nuestra democracia.

El sistema político de eEspaña siempre tuvo dos pilares fundamentales, a falta de un poder judicial independiente, que son el Gobierno y el Congreso. Encontrar el equilibrio entre ellos ha sido siempre una cuestión muy compleja que ha suscitado cientos de debates y leyes outgame, sin que nunca se encontrase el modelo perfecto. Imperfecto y todo, nuestro sistema democrático sobrevivió a muchos intentos de dinamitarlo: saqueos, trameos, borrados, etc.

La aparición de la dictadura como una posibilidad en el juego amenazaba con dinamitar este sistema político al permitir ingame, por primera vez, que la voluntad de un jugador se impusiese sobre la voluntad de la comunidad. Nuestra respuesta fue crear una dictadura de autoprotección, es decir, aceptar formalmente la figura del dictador como un mal menor para preservar nuestra democracia. Este dictador de autoprotección tenía la obligación de respetar nuestro sistema legal y de obedecer al Congreso y al Gobierno, de otra manera, no sería un dictador de autoprotección, sería el mal que se intentaba evitar con la autodictadura.

Digo tenía, porque ya no es así. Como dictador, Leogar ha arramplado con nuestro sistema legal, ha desobedecido al Congreso y ha usurpado una de sus funciones sin consecuencias graves. Ha impuesto su voluntad a la comunidad y las instituciones que representan a esa comunidad no han sabido reaccionar. Con esta votación se ha sentado un precedente que permitirá en el futuro a otros dictadores imponer su voluntad.


El nuevo Lider Supremo satisfecho tras la votación que lo declara intocable

El Congreso ya no cumple su función de control al Gobierno. El respeto a la ley y al ordenamiento jurídico ya no dicta sus decisiones. Los debates se centran en los jugadores y no en los argumentos y las votaciones se mediatizan por personalismos tan a menudo que ya nadie espera que un congresista defienda la ley sin importar contra quién.

En este entorno de caos, Leogar se alza como el más artero, iteligente y retorcido de cuantos congresistas se encuentran cómodos en esas aguas sucias. No por nada ha conseguido que el FPE al completo saliese huyendo del Congreso hace ya varios meses (ese fue quizás el primer clavo del ataúd). Aunque de su huida, los principales responsables son los que huyen, por supuesto. A lo mejor si ellos siguiesen en el Congreso, el resultado hoy hubiese sido otro.

Esta votación nos deja claro que Leogar ejerce tal influencia sobre el Congreso que sabía antes de otorgar la CS, que podía saltarse todas nuestras leyes y librarse pagando una multa de 5 GOLDS. Es preocupante la cantidad de congresistas que votaron en contra de su nongratitud tras un debate en el que Leogar reconoció su culpabilidad desde el principio e, incapaz de contraargumentar las razones jurídicas que se aludían en la solicitud, se dedicó a intentar provocar, atacar y desprestigiar al congresista que la presentó, es decir, a mí.

Pero más preocupante es la cantidad de congresistas que votaron en blanco. Ellos sabrán sus razones para no pronunciarse cuando un jugador impone su voluntad a la comunidad, pero es esa la clase de complicidad silenciosa que marca la diferencia entre un Congreso que se reafirma en el lugar que le corresponde y uno que, por miedo o falta de compromiso con la ley, permite que un jugador le imponga su criterio aunque este vaya en contra de todo lo que se supone que los congresistas debemos defender.


Congresistas asisten preocupados al final de la democracia

Aunque la votación termine como ahora, con una tibia mayoría a favor, dista mucho de la mayoría cualificada necesaria para la aprobación de la nongratitud; es cierto que con un Congreso tan pequeño y fiel, aprobar esta propusta era prácticamente imposible, pero sí teniamos una oportunidad de demostrar, con una mayoría muy amplia y multicolor, que una gran parte de los congresistas creen en un Congreso que no se deja pisar y en un dictador obediente. Teníamos una oportunidad de enviar un mensaje claro a cualquiera que piense en aprovecharse del cargo de dictador en el futuro. Hemos perdido esa oportunidad porque no somos capaces de ver más allá de las personas, más allá de nosotros mismos.

Yo estoy tranquilo, tengo claro que si el dictador que otorgó la CS a Corchuela abusando de su cargo hubiese sido otro jugador mi solicitud hubiese sido exactamente la misma y mi voto también. Ni una sola línea hubiese cambiado. Cada congresista debería hacerse la misma pregunta y si la respuesta es que si el dictador hubiese sido otro su voto y su opinión hubiesen cambiado, es hora de que reflexionen sobre lo apropiado de seguir siendo congresistas.

RESUMEN:

Blablabla, el Congreso es un desastre, blablabla. No nongratearon a Leogar como yo quería y por eso no merecen ser congresistas. Una foto triunfal de Leogar y otra en la que sale Duhr muy guapo y un saludo a Chuchi y Warm.