e1984 (2)

Day 536, 08:54 Published in Spain Argentina by Siddy

Corte el articulo anterior en pedazos, esta es la segunda parte.



No obstante, perduran los peligros del maquinismo. Cuando aparecieron las grandes máquinas, se pensó, lógicamente, que cada vez haría menos falta la servidumbre del trabajo y que esto contribuiría en gran medida a suprimir las desigualdades en la condición humana. Si las máquinas eran empleadas deliberadamente con esa finalidad, entonces el hambre, la suciedad, el analfabetismo, las enfertnedades y el cansancio serían necesariamente eliminados al cabo de unas cuantas generaciones. a medida que la gente sube de skill, la produccion se hace mayor, y la riqueza generada mayor, con el tiempo todo el mundo deberia hacerse mas y mas rico y tener mas y mas bienestar Y, en realidad, sin ser empleada con esa finalidad, sino sólo por un proceso automático -produciendo riqueza que no había más remedio que distribuir-, elevó efectivamente la máquina el nivel de vida de las gentes que vivían a mediados de siglo. Estas gentes vivían muchísimo mejor que las de fines del siglo XIX. asi como hoy en dia, con gente de mucho mayor skill, se produce mucho mas que en el principio del juego, donde la comida Q2 era un lujo casi inasumible.

Pero también resultó claro que un aumento de bienestar tan extraordinario amenazaba con la destrucción -era ya, en sí mismo, la destrucción- de una sociedad jerárquica. el propio juego En un mundo en que todos trabajaran pocas horas, tuvieran bastante que comer, vivieran en casas cómodas e higiénicas, con cuarto de baño, calefacción y refrigeración, y poseyera cada uno un auto o quizás un aeroplano, habría desaparecido la forma más obvia e hiriente de desigualdad. en un mundo con todo el mundo haciendo lo que quiere, el gold perdia su usoSi la riqueza llegaba a generalizarse, no serviría para distinguir a nadie. como se mantendria la jerarquia? quien compraria gold? Sin duda, era posible imaginarse una sociedad en que la riqueza, en el sentido de posesiones y lujos personales, fuera equitativamente distribuida mientras que el poder siguiera en manos de una minoría, de una pequeña casta privilegiada. Pero, en la práctica, semejante sociedad no podría conservarse estable, porque si todos disfrutasen por igual del lujo y del ocio, la gran masa de seres humanos, a quienes la pobreza suele imbecilizar, aprenderían muchas cosas y empezarían a pensar por sí mismos; y si empezaran a reflexionar, se darían cuenta más pronto o más tarde que la minoría privilegiada no tenía derecho alguno a imponerse a los demás y acabarían barriéndoles. evidentemente eso es lo que se quiere evitar A la larga, una sociedad jerárquica sólo sería posible basándose en la pobreza y en la ignorancia. especialmente ignorancia Regresar al pasado agrícola -como querían algunos pensadores de principios de este siglo- no era una solución práctica, puesto que estaría en contra de la tendencia a la mecanización, que se había hecho casi instintiva en el mundo entero, y, además, cualquier país que permaneciera atrasado industrialmente sería inútil en un sentido militar y caería antes o después bajo el dominio de un enemigo bien armado. no se puede hacer desprogresar el juego

Tampoco era una buena solución mantener la pobreza de las masas restringiendo la producción. Esto se practicó en gran medida entre 1920 y 1940. Muchos países dejaron que su economía se anquilosara. No se renovaba el material indispensable para la buena marcha de las industrias, quedaban sin cultivar las tierras, y grandes masas de población, sin tener en qué trabajar, vivían de la caridad del Estado. Pero también esto implicaba una debilidad militar, y como las privaciones que infligía eran innecesarias, despertaba inevitablemente una gran oposición. como el sobrestock o los cambios de formulas de productividad. El problema era mantener en marcha las ruedas de la industria sin aumentar la riqueza real del mundo. Los bienes habían de ser producidos, pero no distribuidos. Y, en la práctica, la única manera de lograr esto era la guerra continua. que efectivamente, mantiene la produccion en aumento constante y la riqueza desvaneciendose en la nada

El acto esencial de la guerra es la destrucción, no forzosamente de vidas humanas, sino de los productos del trabajo. armas, gifts, gold...La guerra es una manera de pulverizar o de hundir en el fondo del mar los materiales que en la paz constante podrían emplearse para que las masas gozaran de excesiva comodidad y, con ello, se hicieran a la larga demasiado inteligentes. y destruyeran el tejido jerarquico, o inutilizaran el goldAunque las armas no se destruyeran, su fabricación no deja de ser un método conveniente de gastar trabajo sin producir nada que pueda ser consumido. de no haber guerras, no se podrian vender armasEn una fortaleza flotante, un DS Q5 para una region que se mantiene temporalmente?por ejemplo, se emplea el trabajo que hubieran dado varios centenares de barcos de carga. casas Q5? Cuando se queda anticuada, y sin haber producido ningún beneficio material para nadie, se construye una nueva fortaleza flotante mediante un enorme acopio de mano de obra. cuando esa region se deja de mantener?. En principio, el esfuerzo de guerra se planea para consumir todo lo que sobre después de haber cubierto unas mínimas necesidades de la población. Este mínimo se calcula siempre en mucho menos de lo necesario, de manera que hay una escasez crónica de casi todos los artículos necesarios para la vida, lo cual se considera como una ventaja. como cuando sube el pan, o no todo el mundo tiene casas Q5?Constituye una táctica deliberada mantener incluso a los grupos favorecidos al borde de la escasez, porque un estado general de escasez aumenta la importancia de los pequeños privilegios y hace que la distinción entre un grupo y otro resulte más evidente. porque en realidad ni los mas grandes empresarios tienen como para poder tanquear diariamente. En comparación con el nivel de vida de principios del siglo XX, incluso los miembros del Partido Interior llevan una vida austera y laboriosa. Sin embargo, los pocos lujos que disfrutan -un buen piso, mejores telas, buena calidad del alimento, bebidas y tabaco, dos o tres criados, un auto o un autogiro privado- los colocan en un mundo diferente del de los miembros del Partido Exterior, y estos últimos poseen una ventaja similar en comparación con las masas sumergidas, a las que llamamos «los proles». La atmósfera social es la de una ciudad sitiada, donde la posesión de un trozo de carne de caballo establece la diferencia entre la riqueza y la pobreza. Y, al mismo tiempo, la idea de que se está en guerra, y por tanto en peligro, hace que la entrega de todo el poder a una reducida casta parezca la condición natural e inevitable para sobrevivir. nunca he visto a nadie quejarse de los enormes presupuestos militares, ni siquiera gobernantes

Se verá que la guerra no sólo realiza la necesaria distinción, sino que la efectúa de un modo aceptable psicológicamente. En principio, sería muy sencillo derrochar el trabajo sobrante construyendo templos y pirámides, abriendo zanjas y volviéndolas a llenar o incluso produciendo inmensas cantidades de bienes y prendiéndoles fuego. Pero esto sólo daría la base económica y no la emotiva para una sociedad jerarquizada. Lo que interesa no es la moral de las masas, cuya actitud no importa mientras se hallen absorbidas por su trabajo, sino la moral del Partido epais? emundo?mismo. Se espera que hasta el más humilde de los miembros del Partido sea competente, laborioso e incluso inteligente -siempre dentro de límites reducidos, claro está-, pero siempre es preciso que sea un fanático ignorante y crédulo en el que prevalezca el miedo, el odio, la adulación y una continua sensación orgiástico de triunfo si no me creen miren la prensa el dia de sardinia, tanto las masas como los dirigentes, todos con un orgasmo. En otras palabras, es necesario que ese hombre posea la mentalidad típica de la guerra. No importa que haya o no haya guerra y, ya que no es posible una victoria decisiva, tampoco importa si la guerra va bien o mal. España esta exactamente igual que al comenzar la guerraLo único preciso es que exista un estado de guerra. La desintegración de la inteligencia especial que el Partido necesita de sus miembros, y que se logra mucho mejor en una atmósfera de guerra, es ya casi universal, pero se nota con más relieve a medida que subimos en la escala jerárquica. Precisamente es en el Partido Interior todos los lideres politicos odian al enemigo, incluso los lideres de partidos pactan entre ellos para ir a TOear franceses, con oposicion o incluso desconocimiento de las masas partidarias donde la histeria bélica y el odio al enemigo son más intensos. Para ejercer bien sus funciones administrativas, se ve obligado con frecuencia el miembro del Partido Interior a saber que esta o aquella noticia de guerra es falsa y puede saber muchas veces que una pretendida guerra o no existe o se está realizando con fines completamente distintos a los declarados. Pero ese conocimiento queda neutralizado fácilmente mediante la técnica del doblepensar. De modo que ningún miembro del Partido Interior vacila ni un solo instante en su creencia mística de que la guerra es una realidad y que terminará victoriosamente con el dominio indiscutible de Oceanía sobre el mundo entero. al fin y al cabo, a ningun presidente le debe resultar una revelacion este articulo, y ya debian haberlo pensado, pero todos pulsan el boton de atacar igualmente

Todos los miembros del Partido Interior creen en esta futura victoria total como en un artículo de fe. Se conseguirá, o bien paulatinamente mediante la adquisición de más territorios sobre los que se basará una aplastante preponderancia como viene ocurriendo , o bien por el descubrimiento de algún arma secreta. un bug decisivo? un TO decisivo?[...]

Mientras tanto, el arte de la guerra ha permanecido estacionado durante treinta o cuarenta años. Los autogiros se usan más que antes, los aviones de bombardeo han sido sustituidos en gran parte por los proyectiles autoimpulsados y el frágil tipo de barco de guerra fue reemplazado por las fortalezas flotantes, casi imposibles de hundir. Pero, aparte de ello, apenas ha habido adelantos bélicos. Se siguen usando el tanque, el submarino, el torpedo, la ametralladora e incluso el rifle y la granada de mano. Y, a pesar de las interminables matanzas comunicadas por la Prensa y las telepantallas, las desesperadas batallas de las guerras anteriores en las cuales morían en pocas semanas centenares de miles e incluso millones de hombres- no han vuelto a repetirse.

Ninguno de los tres superestados intenta nunca una maniobra que suponga el riesgo de una seria derrota. nunca se echa toda la carne en el asado Cuando se lleva a cabo una operación de grandes proporciones, suele tratarse de un ataque por sorpresa contra un aliado. mediante TO o bug previo La estrategia que siguen los tres superestados -o que pretenden seguir es la misma. Su plan es adquirir, mediante una combinación, un anillo de bases que rodee completamente a uno de los estados rivales para firmar luego un pacto de amistad con ese rival y seguir en relaciones pacíficas con él durante el tiempo que sea preciso para que se confíen. En este tiempo, se almacenan bombas atómicas en los sitios estratégicos. Esas bombas, cargadas en los cohetes, serán disparadas algún día simultáneamente, con efectos tan devastadores que no habrá posibilidad de respuesta. Entonces se firmará un pacto de amistad con la otra potencia, en preparación de un nuevo ataque. No es preciso advertir que este plan es un ensueño de imposible realización. Nunca hay verdadera lucha a no ser en las zonas disputadas en el Ecuador y en los Polos: Asia no hay invasiones del territorio enemigo. invasiones de territorio original Lo cual explica que en algunos sitios sean arbitrarias las fronteras entre los superestados. Por ejemplo, Eurasia podría conquistar fácilmente las Islas Británicas, que forman parte, geográficamente, de Europa, y también sería posible para Oceanía avanzar sus fronteras hasta el Rin e incluso hasta el Vístula. un TO o una invasion directa a una gran potencia no es algo mas descabellado que cosas que se han visto en este juego Pero esto violaría el principio -seguido por todos los bandos, aunque nunca formulado- de la integridad cultural. Así, si Oceanía conquistara las áreas que antes se conocían con los nombres de Francia y Alemania, sería necesario exterminar a todos sus habitantes -tarea de gran dificultad física o asimilarse una población de un centenar de millones de personas que, en lo técnico, están a la misma altura que los oceánicos. tener a todos los franceses votando en tu pais? El problema es el mismo para todos los superestados, siendo absolutamente imprescindible aue su estructura no entre en contacto con extranjeros, excepto en reducidas proporciones con prisioneros de guerra y esclavos de color. poco se sabe del resto Incluso el aliado oficial del momento es considerado con mucha suspicacia. la confianza por ejemplo, españa-rumania o argentina-brasil no es 100% El ciudadano medio de Oceanía nunca ve a un ciudadano de Eurasia ni de Asia Oriental -aparte de los prisioneros- y se le prohibe que aprenda lenguas extranjeras. Si se le permitiera entrar en relación con extranjeros, descubriría que son criaturas iguales a él en lo esencial y que casi todo lo que se le ha dicho sobre ellos es una sarta de mentiras. Se rompería así el mundo cerrado y en que vive y quizá desaparecieran el miedo, el odio y la rigidez fanática en que se basa su moral. Se admite, por tanto, en los tres Estados que por mucho que cambien de manos Persia, Egipto, Java o Ceilán, siberia, china, india las fronteras principales nunca podrán ser cruzadas más que por las bombas. regiones originales

Bajo todo esto hallamos un hecho al que nunca se alude, pero admitido tácitamente y sobre el que se basa toda conducta oficial, a saber: que las condiciones de vida de los tres superestados son casi las mismas. En Oceanía prevalece la ideología llamada Ingsoc, en Eurasia el neobolchevismo y en Asia Oriental lo que se conoce por un nombre chino que suele traducirse por «adoración de la muerte», pero que quizá quedaríá mejor expresado como «desaparición del yo». Al ciudadano de Oceanía no se le permite saber nada de las otras dos ideologías, pero se le enseña a condenarlas como bárbaros insultos contra la moralidad y el sentido común. La verdad es que apenas puden distinguirse las tres ideologías, y los sistemas sociales que ellas soportan son los mismos. miren todos los sistemas de las potencias. Miren la distribucion de sus congresos y fijense en su partido dominante, intenten traducir sus programas electorales y busquen diferencias. En los tres existe la misma estructura piramidal, idéntica adoración a un jefe semidivino, la misma economía orientada hacia una guerra continua. De ahí que no sólo no puedan conquistarse mutuamente los tres superestados, sino que no tendrían ventaja alguna si lo consiguieran. Por el contrario, se ayudan mutuamente manteniéndose en pugna. Y los grupos dirigentes de las tres Potencias saben y no saben, a la vez, lo que están haciendo. Dedican sus vidas a la conquista del mundo, pero están convencidos al mismo tiempo de que es absolutamente necesario que la guerra continúe eternamente sin ninguna victoria definitiva. Mientras tanto, el hecho de que no hay peligro de conquista hace posible la denegación sistemática de la realidad, que es la característica principal del Ingsoc y de sus sistemas rivales. Y aquí hemos de repetir que, al hacerse continua, la guerra ha cambiado fundamentalmente de carácter. el paralelismo es claro, y con halessis riendose

En tiempos pasados, beta? una guerra, casi por definición, era algo que más pronto o más tarde tenía un fmal; generalmente, una clara victoria o una derrota indiscutible. la mayoria de las guerras pre-V1 ya no existen, porque se luchaban hasta el final Además, en el pasado, la guerra era uno de los principales instrumentos con que se mantenían las sociedades humanas en contacto con la realidad física. Todos los gobernantes de todas las épocas intentaron imponer un falso concepto del mundo a sus súbditos, pero no podían fomentar ilusiones que perjudicasen la eficacia militar. Como quiera que la derrota significaba la pérdida de la independencia o cualquier otro resultado indeseable, habían de tomar serias precauciones para evitar la derrota. para entonces perder la independencia era muy factibleEstos hechos no podían ser ignorados. Aun admitiendo que en filosofía, en ciencia, en ética o en política dos y dos pudieran ser cinco, cuando se fabricaba un cañón o un aeroplano tenían que ser cuatro. Las naciones mal preparadas acababan siempre siendo conquistadas, y la lucha por una mayor eficacia no admitía ilusiones. Además, para ser eficaces había que aprender del pasado, lo cual suponía estar bien enterado de lo ocurrido en épocas anteriores. Los periódicos y los libros de historia eran parciales, naturalmente, pero habría sido imposible una falsificación como la que hoy se realiza. La guerra era una garantía de cordura. Y respecto a las clases gobemantes, era el freno más seguro. Nadie podía ser, desde el poder, absolutamente irresponsable desde el momento en que una guerra cualquiera podía ser ganada o perdida.

Pero cuando una guerra se hace continua, deja de ser peligrosa porque desaparece toda necesidad militar. El progreso técnico puede cesar y los hechos más palpables pueden ser negados o descartados como cosas sin importancia. Lo único eficaz en Oceanía es la Policía del Pensamiento. Como cada uno de los tres superestados es inconquistable en sus territorios origniales, cada uno de ellos es, por tanto, un mundo separado dentro del cual puede ser practicada con toda tranquilidad cualquier perversión mental. La realidad sólo ejerce su presión sobre las necesidades de la vida cotidiana: la necesidad de comer y de beber, de vestirse y tener un techo, de no beber venenos ni caerse de las ventanas, etc... Entre la vida y la muerte, y entre el placer físico y el dolor físico, sigue habiendo una distinción, pero eso es todo. Cortados todos los contactos con el mundo exterior y con el pasado, el ciudadano de Oceanía es como un hombre en el espacio interestelar, que no tiene manera de saber por dónde se va hacia arriba y por dónde hacia abajo. Los gobernantes de un Estado como éste son absolutos como pudieran serlo los faraones o los césares. admins?Se ven obligados a evitar que sus gentes se mueran de hambre en cantidades excesivas, y han de mantenerse al mismo nivel de baja técnica militar que sus rivales. Pero, una vez conseguido ese mínimo, pueden retorcer y deformar la realidad dándole la forma que se les antoje.

Por tanto, la guerra de ahora, comparada con las antiguas, es una impostura. Se podría comparar esto a las luchas entre ciertos rumiantes cuyos cuernos están colocados de tal manera que no pueden herirse. le conviene al juego, que un pais se haga con supremacia total, mas que la igualdad?Pero aunque es una impostura, no deja de tener sentido. Sirve para consumir el sobrante de bienes y a hacer necesario el gold y ayuda a conservar la atmósfera mental imprescindible para una sociedad jerarquizado. Como se ve, la guerra es ya sólo un asunto de política interna. En el pasado, los grupos dirigentes de todos los países, aunque reconocieran sus propios intereses e incluso los de sus enemigos y gritaran en lo posible la destructividad de la guerra, en definitiva luchaban unos contra otros y el vencedor aplastaba al vencido. En nuestros días no luchan unos contra otros, sino cada grupo dirigente contra sus propios súbditos, y el objeto de la guerra no es conquistar territorio ni defenderlo, sino mantener intacta la estructura de la sociedad. Por lo tanto, la palabra guerra se ha hecho equívoca. Quizá sería acertado decir que la guerra, al hacerse continua, ha dejado de existir. La presión que ejercía sobre los seres humanos entre la Edad neolítica y principios del siglo XX ha desaparecido, siendo sustituida por algo completamente distinto. El efecto sería muy parecido si los tres superestados, en vez de pelear cada uno con los otros, llegaran al acuerdo -respetándole- de vivir en paz perpetua sin traspasar cada uno las fronteras del otro. En ese caso, cada uno de ellos seguiría siendo un mundo cerrado libre de la angustiosa influencia del peligro externo. Una paz que fuera de verdad permanente sería lo mismo que una guerra permanente. Éste es el sentido verdadero (aunque la mayoría de los miembros del Partido lo entienden sólo de un modo superficial) de la consigna del Partido: la guerra es la paz. acaso cambio el mundo cuando el war module estuvo deshabilitado?



en este articulo he puesto unas pocas menos anotaciones (para que saquen sus propias conclusiones) pero hecho las necesarias para introducir un nuevo concepto, que es el concepto admins (argumento que me chafaron en los comnetarios del anterior, hehe)