Join the new world

Estaba mirando las clasificaciones por países y me he dado cuenta de que no somos el país más numeroso, ni el país más fuerte. Tampoco somos los que más periódicos escribimos, ni somos los que más empresas tenemos. Pero sin embargo somos los primeros en el nuevo mundo en exportaciones y en Producto Interior Bruto (dinero que tenemos entre todos), y por mucha diferencia sobre el segundo.



Esto es debido, según mi punto de vista, a dos factores:

El primero la capacidad del español de buscar dinero hasta debajo de las piedras, y si vemos que alguien se lucra a nuestra costa (el jefe) pues queremos nuestra parte (nos hacemos jefes).

El segundo factor es que controlamos una región con hierro alto y eso atrae empresas de nuestros aliados e incluso de nuestros enemigos. Pero eso también le pasa por ejemplo a Grecia y no se ve que afecte mucho a su PIB, aunque sí a sus exportaciones.



Aprovechando el tirón de esta noticia voy a publicar una información relacionada con ésta relativa a mi propia persona y la de otros dos compañeros que entramos en este juego casi a la vez. Somos aspirantes a Ingenieros Industriales (a ellos solo les falta el proyecto) y queremos formar un holding indutrial en eRepublik. Dentro de pocos días tendremos los fondos necesarios para formarlo por nuestra cuenta gracias a unas gestiones hechas por uno de ellos, pero además de crear nuestro emporio, queremos hacer algo que creemos que aún no ha hecho nadie en eRepublik: Crear una sociedad de capital e inversión, con acciones que la gente pueda comprar y vender, y que conlleven un cierto dividendo cada una de ellas. Lo más parecido que he visto son bonos corporativos, que se emiten y liquidan, pero que no admiten negociación. Nosotros vamos a ir un paso más allá. El proyecto aún está en la recámara, pero no tardará en dispararse. En cuanto saquemos las acciones a la venta lo escribiré en un nuevo artículo en este mismo periódico. Cualquier interesado en saber más detalles me puede preguntar por mensaje privado y no tardaré en contestarle.



Un corial saludo: Don Pimpón.