Humor de Cumpleaños... [e-Humor]

Day 1,014, 11:24 Published in Spain Argentina by DUFTY
Como algunos saben hoy cumplo 19 años, asi que ando con poco tiempo pero les dejo este lindo monologo de cumpleaños...



Como muchas otras cosas en la vida, hay eventos que sabemos exactamente cuándo sucederán. Tal es el caso de las vacaciones y fiestas de fin de año. Y, tan regulares como éstas, los cumpleaños.

El hecho de saber que son siempre el mismo día y de la misma manera, debería servirnos para prepararnos con antelación para que, llegado el momento, no nos pase lo que indefectiblemente nos sucede cada año, a saber:

- El feliz cumpleaños: si uno tiene suerte de llamarse Roberto o Marcela no hay problema, son nombres con métrica musical y todos van a cantar lo mismo. El conflicto aparece cuando uno tiene nombres cortitos como Edith o Dufty. Ahí nadie sabe qué cantar, y nos encontramos con un que los cumplas aaeeaahahaeaoouhhaoaa... que los cumplas feliz. Usualmente se apela al diminutivo, aunque Luisito mida 1,97 y sea barrabrava de Cambaceres. En esos casos hay que ponerse de acuerdo entre todos antes de cantar y, después sí, darle rienda suelta al fervor festejatorio.
- La foto del soplido de velitas: a esta altura ya todos sabemos que la cámara digital tarda unos dos segundos en disparar. Entonces, si queremos obtener esa imposible imagen del nene en el momento exacto del soplido, disparamos antes. Y listo. Y si no, volvemos a probar cuando la estúpida vela auto-resucitante haga su show 3 ó 4 veces más. No podemos decir que no se nos dan oportunidades.
- La torta: así como el sánguche de miga de jamón y lechuga ya es parte del pasado, lo mismo debería suceder con ese inexplicable invento pastelero: la torta de crema con durazno. No sé a quién se le habrá ocurrido que era una buena combinación para una torta (está bueno un durazno en almíbar con crema, no un pedazo de merengue telgoporoso con durazno), pero ya está. Que el creador disfrute sus años de gloria inmerecida y se retire a cuarteles de invierno, mientras los cumpleañeros civilizados festejamos con una lógica torta de dulce de leche, chocolate y/o crema, como corresponde.