¿Es España una dictadura militar?

Day 747, 08:05 Published in Spain Spain by Jurgo Evergetes

Antes de la conquista de España por los franceses en agosto, dominaban la política en este país dos partidos: CYD y NEL. En los últimos diez meses, todos los presidentes habían pertenecido a esos dos partidos, que se habían alternado en el poder y habían dado a España una estabilidad que reflejaba su poder real, pues las conquistas de la época del Imperio (cuando gobernaba el PMV y la primera época de NEL) se habían conseguido con métodos no convencionales, que todos conocemos.

Este periodo de la Historia de España cambió cuando en junio Goldfinger se cargó a CYD, el partido más grande en ese momento. A partir de aquí aparecieron en España un grupo de viejunos que, cansados del juego, decidieron joder a la demás gente para divertirse. Goldfinger manipuló y mintió a la militancia de CYD para conseguir el poder en este partido, acción que apoyaron otros ilustres viejales como Kano o Taguaro. Poco después, con NEL en el poder, España fue conquistada por Francia y el gold español se perdió por un error. Aprovechando esto último, ciertos usuarios y cierto partido fueron crucificados inujustamente, continuando con un linchamiento que parece ser en este país el destino de los que no se resignan ante la opinión mayoritaria.



A partir de la Reconquista, España es un país totalmente distinto, pasando a estar controlado por un puñado de usuarios veteranísimos, que aunque llevaban todos más de un año en el juego no tenían la medalla de presidente por diferentes circunstancias. Estos usuarios se apoderaron del partido Reconquista, creado para ser utilizado por todos los españoles para relanzar el país, y aprovechando que era el partido con más afiliados, hicieron de este partido, que era el partido de todos, su propio partido. Este partido se fue llenado desde el principio de la Reconquista de nuevos usuarios y de dosclickers, que sólo entran a votar su partido sin mirar nada más. De este modo, y con el apoyo del partido Forocoches, en el que cientos votan lo que dicen tres, consiguieron ganar las elecciones sucesivamente Himan, Taguaro, Folker y ahora Durruti. Cuatro abuelillos cortados por el mismo patrón, con un importante rango militar y una gran influencia en determinada gente.



No seré yo el que critique la buena gestión de algunos de estos presidentes, con los que hemos conseguido recuperar la riqueza que un día tuvimos, e incluso hemos logrado expandir el territorio español en los últimos días. Pero que la efectividad militar sea perfecta, no quita para que la política española en los últimos meses deje bastante que desear. Y esta situación llegó a su culmen en las elecciones presidenciales de ayer, cuando los tres principales candidatos, sin excepción, dieron muestras en algunos momentos de una patética desesperación por conseguir el poder o porque no lo consiguiera el otro. Tan criticable es el engaño de Ballantines con el avatar de las FF.AA. como el pavoneo militar de Durruti para ganar votos del vulgo inactivo o la rastrera y mafiosa actitud de Warm 2, que no duda en recurrir a espías y topos para conseguir sin escrúpulos su único objetivo: que NEL no gobierne.



Después de una jornada electoral ajustada como nunca se había visto, ya de madrugada unas inesperadas (no para todos) decenas de votos le dieron la vuelta a la situación y erigieron al Mariscal Durruti como el nuevo presidente, para alborozo de los dosclickers de Progreso, de los zombies de Forocoches y, sobre todo, de la elite militar. Esa elite militar (no confundir con las FF.AA., en la que hay gente de todo tipo y hace una labor fantástica) que quita y pone gobiernos, y que ya planeaba un impeachment para sacar hoy mismo si se hubiera dado la victoria de Ballantines. Ese grupo de mariscales que gobiernan España desde la Reconquista, que durante cuatro meses ha regido los destinos de este país. Y repito que me parece impecable su gestión en algunos ámbitos, ya que le han dado a España la posibilidad de expandir sus fronteras. No obstante, debemos plantearnos la cuestión de si España se está convirtiendo, o ya se ha convertido, en un régimen militar. Claro está que los mecanismos de este juego, obligatoriamente democráticos, impiden la instauración de una dictadura. Pero mediante otros métodos al final el efecto puede ser el mismo, pues el engañar o manipular al electorado, utilizar la guerra y las medallas de Heroe con fines electoralistas o aprovecharse de los dosclickers y de los semiactivos mediante tretas publicitarias es lo más parecido que hay en eRepublik a los modos totalitarios.



Quiero que quede claro que no estoy insinuando que los que gobiernan estén haciendo trampas, ni siquiera estoy censurando el totalitarismo (milito en un partido totalitario) siempre que no se engañe al electorado. Pero no podía dejar de hacer esta reflexión sobre lo que se ha convertido España en los últimos meses y que, mirando con perspectiva toda la historia de esta eNación, se asemeja demasiado a un régimen en el que unos pocos poderosos deciden cada mes quién gobierna en cada ocasión, sin dar posibilidad a otras candidaturas. Ese grupo de poderosos militares de PROGRESO que tanto presumen de "apolíticos" en algunas ocasiones quedan perfectamente retratados en wikipedia, en el artículo &quot😉ictadura militar", cuando dice que "los regímenes militares tienden a retratarse como independientes, como un partido 'neutral' que proporciona una dirección interina apartidista en épocas de la agitación, al tiempo que presentan a los políticos civiles como corruptos e ineficaces". Demasiadas coincidencias, ¿no?