CARTA ABIERTA A BUGLIS.

Day 944, 09:58 • Published in Spain Spain • by Elder Lagafash
Buenas tardes queridos lectores, hoy quiero compartir con todos ustedes un mensaje que va dirigido tanto a Buglis, uno de los más afamados erepublikanos a los que puedo llamar compañero de generación, como a todas aquellas personas que en estos días se han ido haciendo eco de su campaña de acoso y derribo contra el Presidente Jesser. Así pues, buenas tardes también a Buglis y a todos sus recientes admiradores.

Para los pocos que a estas alturas desconozcan lo que está ocurriendo, haré un breve resumen de la situación actual: poco después de que Jesser se alzara con la victoria en las últimas elecciones hemos podido ser testigos de cómo Buglis emprendía una campaña contra su Gobierno, basada en el incumplimiento de su objetivo de declarar la guerra a Brasil. Dicha campaña ha ido en progresión ascendente hasta llegar al extremo de que el propio Buglis presentó una moción de censura (que no cuajó) contra Jesser, y se ha intensificado sobremanera a raíz de la reciente y dolorosa pérdida de nuestras dos últimas regiones francesas, Aquitania y Rhone Alps, de modo que incluso ha sido presentada una segunda moción de censura, esta vez por parte de Rexen (que tampoco ha prosperado).

Con este escrito no pretendo hacer ni una apología, ni siquiera una mera defensa de las políticas llevadas a cabo por el actual Gobierno ni de las decisiones tomadas por el Presidente Jesser. El único objetivo que se persigue aquí es analizar los motivos que te impulsan a ti, Buglis, a actuar como lo estás haciendo, y valorar el significado y la trascendencia de tus acciones en el marco de una feroz campaña de desprestigio como la que has emprendido, sin llegar siquiera a atreverme a pronunciarme sobre si lo que realmente persigues es legítimo y/o conveniente para eEspaña o no lo es.

Por mi parte, como saben los que me conocen, no comparto casi ninguna de las ideas que ha venido defendiendo Buglis a lo largo de nuestra andadura en eRepublik, como tampoco comparto en absoluto su fijación contra Jesser, pero creo que todos podríamos llegar a comprenderla: no lo quiere y ya está; es un sentimiento que todos hemos albergado alguna vez hacia más de un político y por tanto no debe resultar difícil de entender.

Así pues, no es contra tus fines, Buglis, contra lo que tengo nada que objetar, pero otra cosa distinta son los medios de que te has estado valiendo y que referiré a continuación: hasta ahora tu campaña se ha basado, por lo que yo sé, en una serie cada vez más frecuente de “gritos” y “comentarios” a los diversos artículos de prensa, en los que repites de manera casi obsesiva un mismo mensaje con ligeras variaciones, siempre en mayúsculas (he llegado a pensar que tu Maldito Teclado tiene el bloq enladrillado), cuyo contenido viene a ser: JESSER DIMISIÓN o PARADA VETE YA. A esto debemos añadir tu artículo criticando la ineficacia del Gobierno en el reparto tickets de viaje para que nuestros “colonos” puedan regresar a Asturias, en el que también ofrecías tu ayuda para solventar los problemas derivados de dicha ineficacia, enviando y costeando de tu bolsillo los billetes de los jugadores que se dirigieran a ti por cuenta propia, lo cual ha estado muy bien hecho, dicho sea de paso, aunque es posible que algunos se hayan aprovechado de ti para levantarte unas pelillas de las que quizá no tuvieran necesidad alguna.

Había empezado a escribir este párrafo preguntándote si de verdad creías que estabas ayudando de alguna manera a eEspaña con todo esto, o si más bien no estarías dejándote cegar por una animadversión irreconcialiable contra Jesser, o si por el contrario intentabas ir labrándote desde ahora una reputación de Estadista fuerte, preocupado por la solvencia militar y económica de eEspaña, e intransigente con las políticas integradoras que prestan oídos a todos los bandos (incluyendo a todos los perroflautas pacifistas que por aquí pululan, con el peligro que, según tú, esto implica). Pero se trataba de preguntas retóricas para las que ya tenía respuestas: sí, sí y sí. Pero dan igual estas preguntas y respuestas, la cuestión verdaderamente importante es si crees que todo lo que has hecho contribuye a debilitar la figura del Presidente, tu rival, o si piensas que estás contribuyendo a fortalecer la imagen que tenemos de ti los eespañoles: y la respuesta en mi opinión es no y no.

Desde mi punto de vista, esta estrategia que has adoptado puede ayudarte a ganar algunos votos para tus artículos, alguna que otra suscripción para tu periódico y quizá hasta unos cuantos individuos que añadir a la tu interminable lista de amistades, pero poco más. Si tu objetivo es alejar a Jesser de la Presidencia, te alejas de él; porque por cada diez hermosos y jóvenes retoños que celebran tus arengas hay al menos cien que las deploran y no ven en ellas más que un ruido sempiterno y creador de confusión; por cada grito o comentario histérico por tu parte, leeremos diez o más artículos ponderados y meditados que pueden estar o no estar en la línea de tus opiniones, pero que siempre estarán estilística, moral y políticamente mejor elaborados y argumentados que los tuyos. Si tu objetivo es acercarte tú mismo a la Presidencia, te alejas de él aún en mayor medida; porque lejos de postularte como un candidato firme y decidido frente a una forma de hacer política que estás en tu derecho de calificar como laxa, hasta ramplona, y sumamente ineficaz en todo lo referente a temas militares y económicos, estás consiguiendo ponerte en evidencia y perfilarte como un líder ofuscado, desquiciado, y completamente incapaz de controlar, no ya el destino de una nación, sino el suyo propio. Y si a esto le añadimos algunas de las polémicas que has protagonizado en el pasado, convendrás conmigo en que es normal que muchos pensemos que tu reputación puede llegar a sufrir daños irreparables en eRepublik; y si alguien cree que el pasado acaba por enterrarse y que al final todo se olvida, le diré que tiene razón, pero con matices, de modo que volveré a esta cuestión un poco más adelante, no sin antes concluir la idea que venía desarrollando.

Tanto tú, Buglis, como muchos de tus seguidores, podrán pensar que esto que digo es una opinión que compartimos unos pocos. Pero yo me atrevo a afirmar a priori que el número de erepublikanos que comparte la idea que acabo de exponer es cada vez mayor, y que no parará de crecer a menos que hagas algo al respecto y que además lo hagas pronto. En parte es para comprobar la veracidad de esta última afirmación mía por lo que me he decidido a publicar y publicitar esta carta abierta, que muchos pensarán, no sin razón, que debí dirigirte a ti única y exclusivamente: te pido disculpas de antemano por el daño que esta misiva te pueda causar, pues no es mi intención herirte, sino moverte a una cierta reflexión y tratar de minimizar el daño que creo que estás haciéndote y haciéndole a eEspaña. Asimismo afronto también la probabilidad, ciertamente alta, de que te tomes a mal estas palabras mías que he decido poner al alcance de todo aquel que quiera leerlas, mas no lo deseo.

Y para terminar volveré a la idea que antes mencionaba, la de que los actos moralmente cuestionables que has protagonizado en el pasado acabará por olvidarse. No voy a enumerar ahora dichos actos, porque no viene al caso, y sí, creo que en circunstancias normales acabarían por quedar sepultados por el peso de nuevos acontecimientos. Lo malo es que para que el pueblo olvide lo que le has hecho, debes dejarlo en barbecho; no puedes cultivar la misma tierra año tras año, pues acabará por agotarse, como la paciencia de la gente, que no va a olvidar tan fácilmente la colección de tus antimedallas (las que no se ven) si no paras de ofrecerles nuevos galardones que colgar en tus vitrinas. Ayer te decía que en eRepublik no solo cuentan los méritos tangibles como las medallas, hoy te digo que cuenta más algo tan intangible como es el espíritu de cada eciudadano, que determina lo que somos mucho más que cualquiera de las medallas que poseamos, y que cada uno de nosotros debe cuidar tanto o más que su vitalidad.

Y aquí me despido de todos, y en especial de Buglis, con la esperanza de que este texto pueda movernos a la reflexión, en lugar de contribuir a crispar más el enrarecido ambiente que se presenta en esta semana, que espero que disfruten todos de la mejor manera posible. Que ustedes lo pasen bien.